Era el segundo fin de semana consecutivo que estábamos hospedados, al igual que el primero, tranquilidad garantizada , para quienes prácticamente sólo estamos a la hora de dormir en las instalaciones del hotel es una perfecta relación calidad/precio.
Para pasar una noche tranquila en medio de un pinar en silencio junto a un complejo deportivo es perfecto la ubicación para encontrarlo bien lo mejor el desayuno en el bar del cimplejo a 50 m del hotel 2 cafes con leche en vaso 1 porra y 2 tosdadas 3'50 euros. Donde se desayuna 2 personas por 3'50 ?? Y el edificio del hotel bien decorado con una gigantesca cocina antigua en recepcion .todo en general muy bien
Las camas eran cómodas. Pero las paredes parecen de papel, se escucha mucho el ruido de las habitaciones de al lado, aunque estén hablando en tono normal se escucha la conversación perfectamente.