Excelente ubicación, hotel bonito, limpio y el personal muy amable. Lo malo fue que la puerta tiene un cristal templado que cumple su función para que nadie te vea desde afuera, pero pasa toda la luz, no se puede dormir porque la luz del pasillo ilumina la recámara durante la noche, tuve que improvisar colgando unas cosas en la puerta, y lo otro, que el personal de limpieza hace muchísimo ruido arrastrando botes de basura y todo lo necesario para limpiar las habitaciones, se entiende y agradece mucho su trabajo pero uno va a descansar y te despierta muy temprano todo el ruido. Fueron 3 noches, las cuales ninguna pude descansar, por la luz o el ruido de personal.